Misa del Centenario de la Coronación de la Virgen de Belén de Almansa | El 5 de mayo de 1925 se celebró la coronación canónica de la imagen de la Virgen de Belén; cien años después, Almansa ha vuelto a demostrar que la devoción continúa viva. Esta efeméride tan especial para el pueblo coincide además con el 75 aniversario de la creación de la diócesis de Albacete y con el Año Jubilar convocado por el difunto Papa Francisco para 2025, que quería dedicar el año a reflexionar sobre la esperanza. Además, se contó con la presencia y participación de Ángel Román Idígoras, nuevo Obispo de Albacete que recién estrena su ministerio con esta especial eucaristía. Con tanta estrella, no es de extrañar que esta jornada solemne enmarcada en las Fiestas Mayores de Almansa haya estado atravesada por la emoción, el simbolismo y una participación multitudinaria. Foto | Jose Manuel García.
A las 9:00 de la mañana arrancaba la Procesión del Centenario de la Coronación de la Virgen de Belén, una cita excepcional que recorrió buena parte de la ciudad desde la Plaza de Santa María hasta la calle Hellín, donde se celebró la misa. El itinerario —que incluyó calles como Virgen de Belén, San Francisco, Santa Teresa, José Rodríguez o Albacete— congregó a autoridades, miembros de la Sociedad de la Virgen, comparsas, representantes eclesiásticos y decenas de vecinos vestidos de gala para la ocasión.
La imagen de la Patrona, llevada entre aplausos y rezos, avanzó acompañada por los sones de la Unión Musical de Almansa y por un fervor popular que llenó aceras, balcones y portales. Cada tramo fue un reflejo de la implicación ciudadana, en una ciudad que este año ha pedido a sus vecinos engalanar sus calles como muestra de compromiso con esta efeméride.
A las 11:00 comenzó la Solemne Misa de Campaña en la explanada de la calle Hellín. El altar, dispuesto al aire libre, fue levantado especialmente para esta ocasión histórica. Presidida por los párrocos de Almansa y organizada por la Sociedad de la Virgen junto al Ayuntamiento, la ceremonia contó con la participación de Martín Baeza, además de también la Coral de la Unión Musical, que interpretó piezas litúrgicas en honor a la Patrona además del himno de la Coronación junto a la Unión Musical bajo la dirección de la batuta de Pascual Marquina en las manos del internacional trompetista almanseño.
Bajo un pálido sol de mayo y con un silencio reverente, el pueblo entero escuchó, como se proclamó hace un siglo, que «la verdadera corona de la Virgen y sus piedras preciosas son las buenas obras de su gente». Los miembros de la Sociedad de la Virgen de Belén fundieron sus metales y piedras preciosas para forjar un broche que fue bendecido e impuesto a la Patrona.
Finalizada la eucaristía, la Procesión de Regreso devolvió la imagen de la Virgen a la Iglesia de la Asunción. El recorrido de vuelta —por Blasco Ibáñez, Corredera, Duque de la Victoria, Aniceto Coloma y Plaza de la Constitución, entre otras— fue igual de emotivo. La devoción se mezclaba con la alegría festiva, y (valga la redundancia) no faltaron los vítores elevados por el Vitorero: «¡Viva la Virgen de Belén! ¡Y el «niñico» también!».
El centenario de la coronación ha sido mucho más que el aniversario de los cien años de la devoción de Almansa a su patrona la Virgen de Belén. Ha servido para renovar el vínculo entre la ciudad y sus raíces; para recordar que, en Almansa, la fe y la fiesta llevan mucho tiempo caminando juntas.
Puedes ver la misa al completo en el siguiente vídeo: