Castilla-La Mancha fue en mayo la segunda comunidad autónoma con mayor crecimiento en la llegada de visitantes y pernoctaciones en alojamientos de turismo rural, situándose como el destino de interior con mejor comportamiento del España.
Así lo valoró la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, a raíz de los datos publicados por el INE correspondientes a los alojamientos extrahoteleros en todo el país, que reflejan las mayores cifras tanto en viajeros como en pernoctaciones de toda la serie histórica para un mes de mayo en el turismo rural de la región.
Castilla-La Mancha, segundo destino nacional en turismo rural
En mayo, Castilla-La Mancha registró un total de 43.445 viajeros alojados en turismo rural y 90.803 pernoctaciones, lo que supone un crecimiento en términos interanuales del 21,6 y del 25%, respectivamente, que sitúan a la región muy por encima de la media nacional y como el destino de interior con mayor dinamismo en turismo rural en el mes de mayo, el segundo si tenemos en cuenta todos los destinos en ambas categorías.
«Las buenas cifras del mes de mayo se producen, además, en el momento de mayor oferta de plazas en el sector de la historia de la región, pese a lo cual se ha producido además el mayor dato de ocupación por plaza para un mes de mayo en toda la serie histórica», señaló Patricia Franco, que valoró que la provincia de Ciudad Real «es la provincia de todo el país con mayor crecimiento en este mes tanto en viajeros, con un 90,2 por ciento con respecto al año anterior, como en pernoctaciones, con un 91,4%; con la provincia de Albacete siendo la quinta con mayor crecimiento en viajeros y la tercera con mejor desempeño en pernoctaciones».
Albacete, entre las provincias con mayor crecimiento
Ese buen comportamiento tiene reflejo también en el resto de provincias, ya que Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Guadalajara registraron récords absolutos en un mes de mayo tanto en llegada de viajeros como en pernoctaciones registradas en turismo rural; mientras que en la provincia de Toledo se registró el mejor mayo de la serie histórica en pernoctaciones en este segmento de alojamiento reglado.
Las cifras del mes de mayo suponen, además, que el inicio del año, en los cinco primeros meses, el turismo rural de la región bata un nuevo récord en un contexto en el que, en el conjunto del país, la demanda tiene un comportamiento muy estable, con crecimientos de apenas unas décimas, mientras que en Castilla-La Mancha el acumulado anual crece un 15,1% en viajeros, alcanzando los 161.659; y un 11,4% en pernoctaciones, con 339.187, siendo además en los cinco primeros meses del año el tercer destino en cuota de mercado en todo el país, con un 10,5%.
«Si sumamos estos datos a los de la demanda hotelera que conocimos días atrás, Castilla-La Mancha tuvo el mejor mes de mayo de toda la historia en el alojamiento reglado, con cerca de 310.000 viajeros alojados y más de 578.000 noches registradas», señaló Patricia Franco, que ha destacado que, con este mes, se confirma el buen inicio de año para el sector turístico en la región. «Entre enero y mayo, el sector turístico regional suma 1,16 millones de viajeros alojados y 2,13 millones de pernoctaciones, los mejores registros absolutos del sector en los cinco primeros meses del año», destacó.
Los alojamientos rurales, fuera de la obligación de registro de la Ventanilla Única
La consejera de Economía, Empresas y Empleo valoró positivamente el trabajo conjunto llevado a cabo por el Gobierno regional, la Federación Regional de Hostelería y Turismo y el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana para aclarar el alcance del Registro de Ventanilla Única para arrendamientos de corta duración, que entró en vigor el pasado 1 de julio.
Este trabajo sirvió para que los alojamientos de turismo rural de la región regulados en el Decreto 88/2018, de 29 de noviembre, que rige la ordenación de los alojamientos de turismo rural en Castilla-La Mancha, estén exentos de las obligaciones que se recogen en la Ventanilla Única. Esta normativa sí será de aplicación a los apartamentos turísticos y viviendas de uso turístico, recogidos en el Decreto 26/2018, de 29 de mayo.