Almansa Feminista, junto con la Plataforma de Apoyo a las Personas Refugiadas (PAR), ha anunciado la suspensión temporal de la marcha-performance «El río de sangre», prevista para este sábado, 11 de octubre, en el Ayuntamiento Viejo. La decisión se debe a la previsión de lluvias intensas para el fin de semana.
«Debido a los anuncios de lluvias, incluso de fuertes lluvias, nos vemos obligadas a suspender la manifestación prevista para el día de mañana y la posponemos para una fecha que anunciaremos con la necesaria antelación», explicó Belén Sánchez, portavoz de la plataforma. Sánchez subrayó que el acto no se cancela, sino que se aplaza, con el objetivo de garantizar la participación y mantener la seguridad de todas las personas asistentes.
Aplazada hasta nuevo aviso
La marcha, organizada por Almansa Feminista con el apoyo de la PAR y otros colectivos locales, forma parte del calendario de movilizaciones en apoyo al pueblo palestino. La primera de ellas y recientemente aplazada, prevista para el 11 de octubre «El río de sangre», invita a las participantes a acudir vestidas de rojo y portar largas telas del mismo color sobre sus cabezas, como símbolo del dolor y la pérdida sufrida por la población gazatí.
Sánchez reconoció el alto al fuego entre Israel y Hamás, aunque advirtió que Israel «ha reanudado ya los ataques, rompiendo así la tregua de manera unilateral». La portavoz celebró cualquier pausa que salve vidas y permita la entrada masiva de ayuda humanitaria, pero recordó que el pueblo de Gaza «sigue sin obtener una paz real» y continúa sufriendo «discriminación, hambre y falta de garantías políticas».
Carmen Valmorisco, en representación de Almansa Feminista, insistió en la liberación de las seis personas de la Global Sumut Flotilla que permanecen detenidas en Israel —entre ellas, la española Reyes Rigo—, así como en la necesidad de transparencia en el tratamiento de las personas interceptadas en la nueva expedición de la coalición de flotillas.
«Seguiremos movilizadas y movilizados, con fecha nueva y con la misma convicción», remarcaron, reclamando una paz «con justicia, sanciones para el genocida y reparación para las víctimas».
Valmorisco concluyó su intervención celebrando que el Premio Nobel de la Paz haya sido otorgado a la venezolana María Corina Machado, y no a Donald Trump, a quien calificó como «cómplice del genocidio».