La Guardia Civil ha desarticulado un grupo dedicado al robo masivo de cobre que operaba en varias localidades de Alicante y Albacete, incluyendo puntos muy próximos a Almansa, como Caudete y Ontur, donde también se cometieron parte de los hurtos.
Según la investigación, en total habrían sustraído casi 3 toneladas de cobre, causando más de 50.000 euros en daños a los ayuntamientos afectados. La operación ha sido posible gracias a la estrecha colaboración entre las unidades de Robos en el Campo (ROCA) de Ibi, Almansa y Hellín, que trabajaron conjuntamente para frenar esta oleada de robos que venía afectando a infraestructuras municipales desde el verano.
Los agentes sorprendieron a dos de los detenidos cuando intentaban vender el cobre que presuntamente habían robado pocas horas antes. El grupo actuaba siempre de madrugada, arrancaba grandes tramos de cableado y posteriormente quemaba su recubrimiento para vender el metal en un centro de reciclaje, cuyo responsable también ha sido investigado por presunta receptación.
La investigación se remonta al 24 de septiembre, cuando se denunció la sustracción de casi 700 metros de cable en el municipio de Pinoso (Alicante). Las pesquisas llevaron a identificar a los dos implicados, todos ellos con «numerosos antecedentes» por hechos similares.
Una oleada de robo de cobre en municipios cercanos a Almansa
Las indagaciones determinaron que, desde el mes de agosto, habían perpetrado una oleada de hurtos de cableado, de manera sistemática, en diferentes poblaciones. El ‘modus operandi’ era siempre el mismo: actuaban de madrugada, trasladaban el cobre robado hasta una zona donde eliminaban el recubrimiento plástico y luego lo vendían en un centro de reciclaje.
Durante la madrugada del 31 de octubre, agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil de Onil (Alicante) sorprendieron a uno de los investigados cargando cobre en el maletero de un vehículo. Al percatarse de la presencia de las fuerzas de seguridad, el individuo se fugó, sin que le pudieran detener en ese momento.
Finalmente, el 7 de noviembre, el equipo ROCA de Ibi montó un dispositivo de vigilancia. En esta actuación, cazaron a dos de los miembros del grupo. Se les detuvo cuando intentaban vender 120 kilos de cobre recién robado en Salinas. Más tarde caería el tercer detenido y se investigaría al responsable del centro de reciclaje, que habría obtenido unos 15.000 euros en tres meses comprando material sustraído.
En la intervención se recuperó también documentación de dos personas, utilizada para anotar ventas previas de varios cientos de kilos de cobre.
En total, se les atribuyen 11 robos de cobre cometidos entre Alicante y Albacete, incluidos Caudete, Fuente Álamo, Ontur y Albatana. Además, se les imputan delitos de falsedad documental, receptación y contra la seguridad vial. Los tres detenidos son dos hombres de 36 y 41 años y una mujer de 38, así como un investigado de 26 años. Los juzgados de San Vicente y Novelda han decretado su libertad con cargos, a cada uno en función de su grado de participación.
La operación ha devuelto la tranquilidad a una zona especialmente castigada por los robos de infraestructuras. Los hechos se han esclarecido gracias a la colaboración entre las unidades ROCA de Ibi, Almansa y Hellín, junto con las policías locales de Onil y Elda.







