«En estos tiempos de incertidumbre, las empresas no saben qué van a hacer al mes que viene», afirmó Enrique Navalón, presidente de la Asociación de Fabricantes de Calzado. Así comenzó su análisis de la «terrible» situación que atraviesa el sector en Almansa, en una rueda de prensa celebrada en el Centro de Empleo a la que asistieron el alcalde de la ciudad, Sánchez Roselló, la concejala de Empleo, Antonia Millán, y el edil de Desarrollo Empresarial, Alfredo Calatayud.
Situación «bastante mala»
«En general, la situación sigue siendo bastante mala. Hay empresas paradas, otras funcionando con parte del personal y otras, muy pocas, una o dos, que siguen faenando con todo el personal en activo. Hay mucha gente en ERTE. Pero lo más preocupante e importante, es que empiezan a surgir paros definitivos, fuera de ERTE», comentó Navalón.
«Lo que nos viene encima en estos próximos meses no es nada halagüeño. La evolución de la situación epidemiológica no da señales para hacernos pensar que esto ha pasado. Difícilmente volveremos pronto a la normalidad», lamentó el presidente de la Asociación de Fabricantes.
Las exportaciones, paradas
Hay que tener en cuenta de que los fabricantes del calzado en Almansa dependen hasta en un 80% de la exportación, de las ventas al exterior de la ciudad. «Nuestros mercados habituales están prácticamente cerrados, como Alemania, Francia, Italia o Inglaterra. Sobre todo los Estados Unidos, que actualmente no están comprando nada», advirtió Navalón.
«En definitiva, la temporada de ferias y pedidos está perdida. Hay encargos que se cerraron allá por octubre y noviembre que ahora están siendo suspendidos o aplazados por los clientes. Esto crea una gran incertidumbre en la empresa, no sabemos si acabar pedidos porque luego nos los pueden echar para atrás. Más y más incertidumbre», explicó el presidente.
Navalón aclaró que estos casos pertenecen a la temporada pasada, la cual «se dio por perdida en un primer momento, pero que luego se consiguió rescatar parcialmente». Ahora está empezando la actual temporada; en la que «resulta que se están cancelando o aplazando las principales ferias del calzado», informó Navalón.
«Un verdadero desastre»
Por lo tanto, según la Asociación de Fabricantes de Calzado, al no haber visitantes en las ferias, ni la posibilidad de viajar para visitar a clientes potenciales, ni certidumbre en el devenir de la estación: «Esta temporada va a ser un verdadero desastre».
Las esperanzas del sector zapatero residen en el segundo semestre del año. Navalón finalizó declarando: «Esperamos que las empresas puedan aguantar este tirón, porque se está haciendo demasiado largo. Ojalá la vacuna llegue de verdad y sea una solución para paralizar la pandemia».