Parte de los 6.000 fósiles de animales con siete millones de años de antigüedad hallados a partir de una excavación en el término municipal de Caudete se pueden visitar en la Casa de Cultura del municipio. Las obras de construcción de la autovía A-33 a su paso por la localidad dieron con unos primeros restos de huesos de forma fortuita, y estudios paleontológicos posteriores sacan a la luz el resto de vestigios en un yacimiento bautizado como «El Cruce». Algunas de las piezas se exhiben ahora en el centro cultural. Imagen | Acciona

Los primeros restos se encontraron por sorpresa por parte del equipo de trabajo de la constructora Acciona, encargada de desarrollar las obras de mejora de comunicaciones entre los municipios de La Font de la Figuera (Valencia), Caudete (Albacete) y Villena (Alicante). Al iniciar la construcción de un pilar que sostendría un puente sobre la autovía, se descubrieron a unos 6 metros de profundidad «restos blanquecinos y algunos huesos mezclados con la tierra», comentan desde la compañía. Tras ello, iniciaron un protocolo ideado para situaciones de hallazgo de restos arqueológicos que detuvo las obras, se avisó al Ministerio de Transportes y se recurrió al conocimiento de paleontólogos.

Hallados 6.000 fósiles en una excavación de Caudete

Desde la compañía constructora destacan que los hallazgos fueron «inesperados y fortuitos», pues antes de comenzar las obras se valoró la posibilidad de encontrar restos en otras zonas, pero no existían indicios de que pudiera suceder en ese lugar en particular. Además, también resaltan que, antes de iniciarse los proyectos se llevan a cabo «prospecciones y catas de detección de posibles restos arqueológicos» aunque en cotas más superficiales en todo el terreno que ocupará la obra. El hoyo excavado posteriormente, de unos 12 metros de profundidad, resultó ser mayor que el tramo analizado en los exámenes previos habían analizado.

Tras los avisos del equipo de constructores, paleontólogos de la Fundación Cidaris excavaron en la zona donde habían aparecido los primeros restos. Sus operaciones han tenido por resultado el descubrimiento de «un yacimiento de gran valor tanto por su extensión como por la información científica que aporta», comentan desde Acciona. También resaltan la relevancia social del hallazgo: «Al final, estamos ante algo que pertenece a la sociedad, es un patrimonio y un bien común que hay que respetar y tiene prioridad absoluta».

Restos de caballos hipariones en territorio castellanomanchego

Los restos encontrados en el yacimiento de «El Cruce», en el paraje de «El Estrecho de Caudete», a unos 3 kilómetros al este de la localidad. Estos incluyen huesos de reptiles, invertebrados, rinocerontes, roedores, artiodáctilos (mamíferos ungulados de dedos pares) o «caballos hipariones». Los últimos están concebidos como antepasados de pequeño tamaño de los caballos actuales, y estuvieron presentes en la Península Ibérica en el periodo del Mioceno Superior (hace alrededor de 10-15 millones de años).

Los hipariones midieron cerca de metro y medio de altura, tenían patas cortas y los ojos más separados que los caballos que conocemos. Se trata de una especie que desapareció hace unos 2,5 millones de años. Algunos de los hallazgos están exhibidos en la Casa de Cultura de la localidad, junto a materiales, fotografías y vídeos del trabajo de los paleontólogos en la zona.