Antonio Esteban Arocas «El Maño» es hoy una figura desconocida para una gran parte de la población almanseña, la de menor edad. Es por ello necesario, a mi parecer, devolverlo a la actualidad y reconocer el valor de su trabajo y dedicación hacia nuestra ciudad, parte del cual pervive entre sus calles. Foto: Archivo fotográfico de José Luis González Esteban
A esta tarea nos hemos dedicado desde la asociación Torre Grande, con el diseño y organización de la muestra El maño. Humanista almanseño. Se inaugurará el 6 de abril en la Casa de Cultura a las 19:30 horas y permanecerá expuesta hasta el día 30 del mismo mes en las salas 1 y 2 de la planta baja.
Seguidamente, a las 20:00 horas en el teatro Principal, tendrá lugar una conferencia a cargo de José Luis González Esteban, profesor de la universidad de Miguel Hernández de Elche, y nieto del «Maño». Debido a las limitaciones de aforo por la pandemia solo podrá accederse mediante invitación, aunque no hay mayor problema pues será emitida en directo por Tv Almansa.
Se pueden adelantar algunas notas biográficas sobre su figura. «El Maño» nació en 1914 y su apodo lo heredó de su padre, llamado así por su buena maña taurina. Como a tantos españoles y españolas, la Guerra Civil marcó su juventud, y Antonio fue enrolado en el ejército republicano, en logística.
Tras la guerra casó con Ramona Serrano, la madre de sus tres hijos y su musa particular, a modo de Gala y Dalí. Tras un tiempo de estancia en Madrid, la pareja retorna a Almansa, en donde «el Maño» pasó a dedicarse por completo a su labor creativa. Trabaja como diseñador y publicista de diversas empresas de distintos lugares, también almanseñas (Sancho Abarca, Coloma, autoescuela Tercero…).
Proyecta y construye viviendas y chalets de particulares, la mayoría de los cuales sigue en pie, como la casa y fábrica de Amadeo Sánchez o la piscina Oasis. También construyó su propia casa-estudio junto a los Jardinillos de la estación, a la que dota de su peculiar y original personalidad. En ella vivirá y trabajará el resto de su vida.
En su faceta de reformista y decorador trabaja en negocios y viviendas de distintos lugares: Albacete, Alicante, Jumilla, Madrid, Toledo, Villena, Yecla, Melilla (en donde realizó la reforma integral del Gran Teatro Nacional melillense, con más de 2.000 butacas). Y por supuesto en su ciudad, Almansa, donde reforma el Bar Alfonsico y el convento de padres Franciscanos, entre otros trabajos.
Tuvo tiempo además de dedicarse a sus muchas pasiones artísticas. En su casa-estudio surgían cientos de poemas, dibujos, retratos, pinturas y música y letras para canciones o himnos, como los dedicados a su apreciado Santiago Bernabéu o al castillo de Almansa y claro está, a su familia a la que adoraba (sus padres, su esposa Ramona, sus hijos Maribel, Tono y Ana y finalmente a los nietos de estos). Enamorado de su ciudad, fue generando durante años una enorme colección fotográfica sobre Almansa y su término, sus gentes, sus costumbres, sus fiestas… que impregna de su original mirada. Hoy día, este archivo fotográfico constituye un valioso testigo de una Almansa que ya no volverá.
Sus fotografías constituyen la base de la muestra que sobre su obra se organiza desde la asociación Torre Grande. En ella también podrán verse obras suyas en otros campos: arquitectura, decoración, dibujo, diseño, escritura, música, pintura, publicidad… Pues Antonio Esteban Arocas «El Maño» trabajó en todos ellos, y muy bien. Es así muy merecida la etiqueta de «humanista» elegida para esta muestra, como si de un Leonardo almanseño se tratase.
Una selección de todas ellas, entre las que se incluyen diversas obras originales (diseños, poesías, collages…), es la protagonista de esta muestra dividida en tres áreas: Familia, Mundo del trabajo y Crónica de una ciudad. Esperamos que les guste tanto como a nosotros organizarla.
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