Todas las mujeres que tuvimos la suerte de ver a la Christine (Raquel Martínez) del El fantasma de la Ópera en el Regio, queríamos ser esa protagonista. Seguramente por los ingredientes que contiene este musical, y por lo bien que la representó en Almansa en 2017, tanto interpretativamente como musicalmente, Arte Escénico. La compañía conmemoró los 20 años del estreno de tan afamada obra con un rotundo éxito en la ciudad.
Una historia verídica en la que se basó la novela gótica de Gastón Leroux, con tintes de romance, terror, drama, misterio y tragedia. La novela está ambientada en el siglo XIX, en París, y tiene como escenario, el escenario la Ópera Garnier. Como dice la propia Raquel fue «un reto» para ella, tanto vocal como de interpretación, pero alcanzó el fin: representar un Christine romántica, a la vez que fuerte y decidida.
Hace muchos años, en 1994, comenzó su andadura Arte Escénico, con un amplio abanico de obras. La ya citada, Sunset Boulevard (película de 1950 conocida en España como El Crepúsculo de los dioses), Un día más, Joseph y el manto multicolor (es la primera ópera rock escrita por los famosos autores Andrew Lloyd Webber y Tim Rice), Jekyll & Mr. Hyde (un musical de 1990 basado libremente en la novela de 1886 de Robert Louis Stevenson), Gala Disney (preciosas las bandas sonoras de Disney para todos los públicos), Inquietudes, Un sueño imposible, Mamma mía (un musical o sinfonola basado en las canciones grupo sueco ABBA, con libreto de la dramaturga británica Catherine Johnson), Hoy no puedo me levantar (Mecano) y Sister Act (la famosa película).
En cuanto a obras de teatro: Un paraguas bajo la lluvia (es una obra de teatro de Víctor Ruiz Iriarte de 1965), Petra regalada (de Antonio Gala), La casa de Bernarda Alba (Federico García Lorca), Medea (Tragedia de Eurípides), Actrices, La gata bajo el tejado de zinc caliente (película estadounidense de 1958, con actores como Elizabeth Taylor y Paul Newman), Maribel y la extraña familia (Miguel Mihura), Hay que deshacer la casa y Anillos para una dama (Antonio Gala), así como su colaboración en presentaciones de reinas y desfiles…
Desde luego, Arte Escénico, inquieto sí que es. Además toca «todos los palos». Se atreven con distintos géneros, reinventándose, en un jamás imposible y llevando a cabo unos montajes complicados. Según Raquel, poniendo los pies la tierra, ve que no pueden llevar a cabo todos los montajes teatrales que les gustaría, bien por complicarse mucho el engranaje de la representación, suponer mucho económicamente hablando, etcétera.
Pero no es hablar de lo que no pueden, si no de lo ya han hecho, que es mucho, variado y que llega a la gente; a su público, un público ya fiel en Almansa, y con el que deben sentirse muy arropados. El clima dentro de la compañía dice Raquel que es «bueno», basado en el respeto y sobre todo en el disfrute, para que así los que los vean también lo hagan. La actriz y cantante termina diciéndome que Arte Escénico le ha aportado mucho a su vida, tanto en lo personal, como en lo artístico, y que se siente muy agradecida y afortunada de pertenecer a la compañía.
Yo, por mi parte, en el repaso que he hecho de sus obras representadas, observo por parte del género musical, como si hubieran pasado de dramas a intentar cantar lo que todos conocemos, todo lo que nos suena y remueve (aunque todo tiene su encanto, incluso lo menos conocido). En cuanto a obras de teatro, me percato de que hay muchos autores españoles y papeles femeninos. Completamente de acuerdo en reivindicar lo nuestro y comprobar, por mi parte, que hay mucha afición femenina al teatro. Y masculina, claro.
