Cientos de jóvenes comienzan a desplazarse a la vecina localidad de Ayora desde hoy. El ya legendario festival de música alternativa GazpatxoRock ha sobrevivido a la pandemia y vuelve con fuerza tras dos años de sequía de conciertos en vivo tal y como los conocíamos. Foto | @garaygreen

Charlamos con Alfonso Blanco, quien nos traslada las sensaciones de la organización cuando quedan horas para retomar el festival. «Es una alegría sentir que poco a poco podemos retomar el pulso de la música en directo. Nos sentimos privilegiados porque estos dos años hemos podido hacer eventos, que han hecho más llevadera la espera», explica Alfonso Blanco haciendo referencia al «GazpatxicoRock» que se celebró el pasado verano, eso sí, con el público sentado y manteniendo una normativa sanitaria más estricta.

«En 2020 fuimos muy afortunados ya que tuvimos la suerte de poder ser uno de los pocos festivales que pudieron celebrarse antes de que la pandemia estallara por los aires», recuerdan desde la organización, y es que el GazpatxoRock XV fue el último gran evento musical desarrollado en el sureste antes del Estado de Alarma. Los fanáticos de la música almanseña recordarán que tras el festival de Ayora, solo hubo una oportunidad más de vivir los conciertos como antes; en el Festikral 2020.

Adaptados a la situación

En el año 2021 la organización del GazpatxoRock no se resignó a parar al 100%: «Aunque no pudimos hacer la edición normal del festival que todos los años hacemos en el mes de febrero, planteamos una versión reducida y adaptada del evento. A esta edición la llamamos «Gazpatxico Rock». Fueron dos días de conciertos, con el público sentado y respetando las medidas vigentes, que al menos nos hicieron más llevadera la espera». Un oasis en un desierto cultural que, por fin, llega a su final.

Este año, el formato será el habitual de evento, cumpliendo las medidas sanitarias vigentes, «pero deseando con más fuerza que nunca volver a vernos en Ayora», afirma ilusionado Alfonso, para añadir: «El sector ha sufrido mucho durante estos dos años, y realmente nos sentimos muy afortunados de poder haber aportado nuestro granito de arena a que el sector cultural y en especial, la música en directo, pueda continuar adelante».

Un festival de referencia

La burbuja de los festivales crecía a un nivel frenético durante 2019-2020, cada año que pasaba, nuevos formatos, más grandes y más internacionales aterrizaban en distintos puntos del país. Mientras tanto, el festival de Ayora, en pie de guerra desde 2006 continuaba ofreciendo un espectáculo gustoso en pleno invierno y con una audiencia cada vez más fiel.

«Aunque es complicado, creemos que nos hemos ganado un hueco dentro del circuito. La historia del festival está fuertemente ligada a la de Ayora. El nombre del mismo proviene del plato típico del municipio: los gazpachos, siendo una seña de identidad del evento el dar a probar a todos los asistentes de manera gratuita una ración de este plato popular», narra Alfonso Blanco.

Y así, entre gazpachos, abrigos y canciones de punk, el festival de Ayora siguió creciendo y haciendo partícipe del evento a toda la población. «El hecho de llevar diecisiete años convirtiendo un festival de música alternativa como es el punk-rock en una fiesta en la que participa de una forma u otra gran parte del pueblo, creemos que es parte del éxito que hace que el evento sea lo suficientemente atractivo, como para que la gente de otras ciudades más lejanas que se planteen hacer kilómetros para asistir hasta Ayora en el mes de febrero».

Fiesta con sol

Este año, por primera vez en la historia del festival, el primer concierto del sábado será a las 14:30 horas y será ofrecido por los yeclanos Rokavieja. Por lo que el último de los bolos, de El Último Ke Zierre (valga la redundancia), comenzará a las 00:30. A pesar de que luego habrá una afterparty en la Sala Matadero, este será un cambio importante para el público, ya que por lo normal el festival terminaba a altas horas de la madrugada. 

Alfonso Blanco explica esta variación de horarios: «Hay varias razones que justifican este cambio. Por un lado, el hecho de que no haya zona de acampada debido a las restricciones establecidas por la autoridades competentes. Así favorecemos que el evento no acabe tan tarde y quien lo desee, pueda volver a casa. Además, la carpa donde se celebran los conciertos estará bien ventilada por cuestiones sanitarias, y creemos que no acabar tan tarde en el mes de febrero puede ser beneficioso para el propio evento. Por último, la pandemia creemos ha modificado algunos hábitos y adelantar el evento puede amoldarse mejor a las costumbres que hemos ido modificando estos años».

Cartel completo del Gazpatxo Rock

Tremenda calidad musical y de espectáculo para esta edición. El GazpatxoRock XVI contará con el surf y ska del ascendente grupo Rokavieja, de Yecla. Continuará con la participación de Lisasinson, banda con prometedora proyección con tan solo cuatro años desde su creación en una facultad de Bellas Artes en Valencia. Tras su actuación será el turno de Porretas, leyendas que no necesitan presentación.

A las seis de la tarde comenzará a retumbar «ruido del bueno» con Manifa, grupo punk con gran potencia y golpe cuya puesta en escena no deja indiferente a nadie. Seguidamente, ya con el sol puesto a las siete de la tarde, Evaristo Páramos debutará con su nueva banda Tropa do Caralho, nueva etapa para la voz del punk español por excelencia.

Los tres últimos grupos son capaces de movilizar a decenas de miles de personas en sus bolos. Desakato, cabeza de cartel allá donde van, grupo asturiano que no defrauda ni en disco ni en vivo. ZOO y su música electrónica alternativa en valenciano harán las delicias del respetable presentando su último disco Llepolies. El Último Ke Zierre, unos clásicos en el Gazpatxo Rock, serán los encargados de cerrar la carpa. Con el último acorde, la fiesta se trasladará a la sala Matadero con el show de Gomad & Monster, cuyo aforo ya está vendido al 70%.

Hoy viernes se celebrará la fiesta de bienvenida en la sala Matadero, con la presencia de los grupos Amarillo Fiesta, cuya voz principal es almanseña, y Fuckop Family, en lo que será el pistoletazo de salida de la XVI edición de uno de los festivales de invierno más relevantes de todo el panorama nacional.