La radio es como aquel primer juguete que te regalan de pequeño, el primero que tienes y lo cuidas con mimo y cariño como a nada en este mundo, estás todo el día pegado a él. Pero poco a poco vas recibiendo nuevos juguetes, más nuevos, más novedosos y que te entretienen más; y poco a poco lo vas abandonando.
Así se podría representar lo que le hemos hecho con la radio, ha pasado de ocupar el centro neurálgico de reunión de nuestros hogares y ser el corazón de este, a despreciarlo y apartarlo a pequeños momentos de monotonía y rutina, como cuando vamos en coche. Pero la radio es mucho más.
Hoy 13 de febrero se celebra el día mundial de la radio. La idea de establecer el Día Mundial de la Radio nació del presidente de la Academia Española de la Radio, Jorge Álvarez, que en enero de 2008 solicitó la instauración de esta celebración y en 2012 fue aprobada por la ONU.
La magia de la radio es que el locutor tiene que convencer a través de la voz. Por supuesto, una voz que tenga algo que decir. En la televisión se escriben guiones y una cara bonita lee un teleprompter. Sin embargo, en la radio es algo mágico, realmente se «siente» cuando quien habla sabe de lo que está hablando.
La radio juega un papel fundamental para informarse en aquellos rincones del mundo donde internet no llega, ya sea por falta de infraestructuras o porque la gente no puede permitírselo. En estos casos la radio demuestra que la información es un derecho básico que debe de estar a disposición de todos.
En 1981, cuando comenzó MTV, la música dejó de escucharse para verse también. En ese momento se pensó que la radio iba directa a la muerte. Pero 35 años después MTV es todo menos música, y la radio sigue más viva que nunca.
La radio es la forma versátil y dinámica de ver o, mejor dicho, de escuchar la vida. Es capaz de adaptarse a los nuevos formatos. Quizá ahora la radio no ocupa el lugar predominante en nuestro salón, pero la tenemos en el coche, en el móvil, en todos los dispositivos que imagines, pudiendo escuchar cualquier emisión del mundo con un solo clic. La radio traspasó, traspasa y traspasará fronteras.
Por todo ello la radio no ha muerto, la radio sigue mas viva que nunca. Ya en pleno siglo XXI, la radio sigue teniendo mucho que ofrecer y aún le resta mucho camino por recorrer