El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha avanzado esta mañana que la Comunidad Autónoma establecerá la “obligatoriedad de la conmemoración del 8 de marzo” para que “todo tipo de instituciones celebren como se merece un acto que requiere de explicación, de reivindicación, pero también de fiesta, al menos para celebrar todo lo que se ha avanzado y todo lo que se ha conseguido”, ha subrayado.
Así lo ha dado a conocer García-Page este 8 de marzo, en el acto institucional del Día Internacional de las Mujeres que se ha celebrado en la localidad albaceteña de Almansa, donde ha acompañado a las galardonadas de esta edición, cuya trayectoria personal y profesional ha sido reconocida por la sociedad castellanomanchega en esta jornada. “Todo es consecuencia del esfuerzo, de la determinación”, ha valorado al comienzo de su intervención.
Acompañado por la portavoz y consejera de Igualdad, Blanca Fernández, y junto al resto de consejeros y consejeras del Gobierno autonómico, García-Page ha precisado la aprobación de un “protocolo obligatorio”, que será auspiciado “en el mes de abril”, y que irá dirigido a que “colegios, centros educativos, bibliotecas” puedan conmemorar “esta fiesta por la igualdad, que lo es de las mujeres y de los hombres, porque en eso consiste”, ha resaltado.
Bajo el lema ‘De igual a igual’, en un acto que ha contado con la participación de representantes de todos los ámbitos de la sociedad castellanomanchega, el jefe del Ejecutivo regional ha manifestado que “tenemos la responsabilidad de no parar, porque todo termina calando”, al tiempo que ha destacado que “la mujer ha sido, probablemente, lo que más ha hecho que este país no se parezca casi nada a lo que había antes de la Constitución”, ha rematado.
Por una “unidad de acción” contra la desigualdad
Paralelamente, el presidente autonómico ha lamentado que, en España, “no se está hablando con franqueza del problema que tenemos planteado” en alusión a la llamada ley del ‘solo sí es sí’. A este respecto, Emiliano García-Page ha señalado que “si estamos de acuerdo en que las sanciones tienen que ser más duras para quienes maltratan o violan, por qué estamos hablando de esto”, se ha preguntado.
En este contexto, ha considerado que “a río revuelto, ganancia de violadores”, mientras ha puesto de relieve que “las mejores leyes se hacen a favor de algo, no en contra”. Por este motivo, García-Page ha reclamado “no unidad de opinión, porque hay muchas sensibilidades, sino unidad de acción”. En este sentido, ha aseverado que “el enemigo no está en este lado, el adversario está en frente, donde lo niegan”, ha concluido.
Del mismo modo, el jefe del Gobierno castellanomanchego ha reconocido que “el feminismo se ha abierto paso como el gran movimiento de cambio de la Humanidad” en un proceso que se ha desarrollado “con resistencia y rebeldía, pero sin violencia”, algo que a juicio de García-Page “dice mucho de un planteamiento muy convulso y zarandeado en España”.
Asimismo, el presidente García-Page ha valorado “la estabilidad” de la que goza Castilla-La Mancha, un hecho que “también ayuda a la igualdad”, porque “donde hay gresca, las cosas no salen, siempre hay pretextos y argumentos para no avanzar”, ha resumido.
Un apoyo sin “excusas” a la igualdad en Almansa
“Estar aquí significa apoyar, encontrar excusas para no estar es muy lamentable”, ha incidido el presidente regional ante cientos de personas en el auditorio de la Unión Musical. “Y los que son de aquí de Almansa, con más motivo”, ha puntualizado en referencia a la ausencia, en este acto institucional, del presidente del PP regional, el almanseño Paco Núñez.
En este punto, ha criticado que “si no querían estar aquí para celebrar la igualdad, tendrían que estar hoy celebrando que la capital de la igualdad es Almansa”, ha zanjado.