En septiembre del año pasado entró en vigor la nueva Ordenanza de tráfico en Almansa. Con su llegada desapareció el estacionamiento alterno que regía el aparcamiento de vehículos en ciertas calles de la ciudad, sobre todo en el barrio de San Isidro. Con esta extinta normativa los coches aparcaban en una acera u otra dependiendo del mes (par o impar). Fotos | Facebook
De esta forma, quedaron definidos y fijos los lados en los que se puede aparcar. La Policía Local de Almansa y la concejalía de Seguridad realizaron la transición en ciertas calles siguiendo criterios de seguridad, circulación y optimización del espacio de estacionamiento.
Meses después, llegó la polémica
Vecinos del barrio de San Isidro han manifestado su opinión por redes sociales, y aunque hay opiniones tanto positivas como negativas por este cambio, las quejas se están haciendo escuchar por los foros locales.
«Con este nuevo formato de aparcamiento estamos mejor organizados. Antes había vecinos, yo incluso alguna vez, que nos equivocábamos con el cambio de acera», afirma un vecino a La Tinta. El mismo conductor considera que ahora la calle es «más accesible».
Otro conocido almanseño asegura por redes sociales que esta distribución ha generado varios inconvenientes para la vecindad. Por una parte, asegura que genera más suciedad. Por otra, también provoca que los vehículos sufran más calor.
«Si los coches están pegados a la acera, es imposible que cada vecino limpie su zona. A la vez, los conductores podríamos tener unos meses en los que el coche no se socarre al sol todo el día», expone este vecino, y añade: «No se cuál es el motivo de este cambio ni lo entiendo».
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