Laura Fernández, en representación de Izquierda Unida, durante el pleno telemático de octubre defendió la posición de su partido frente a las modificaciones de las ordenanzas fiscales para 2021. El grupo votó en contra por diversas razones y criticó la gestión del Ayuntamiento.
«Primeramente, no deberíamos votar todas las ordenanzas en conjunto, debería haber expedientes y estudios de cada una. Instamos para que el próximo año nos permitan debatir las ordenanzas como se deben. Hay documentos que son más difíciles de estudiar por su complejidad. Se debería cumplir la normativa, esta documentación estuvo disponible a última hora y es imposible su estudio para la comisión».
«Nos encontramos ante un Ayuntamiento que deja ver que es bastante insolidario, aún viendo la situación por la que pasan los ciudadanos. Aunque las comparaciones siempre han sido odiosas, hay Ayuntamientos cercanos que han ayudado a sus ciudadanos de forma mucho más directa. Con estas ordenanzas, vemos una eliminación de las bonificaciones y un aumento de precios».
Laura Fernández criticó que no se tuviera en cuenta la moción aprobada en el último en relación a la tasa intermedia del agua para comerciantes: «Desde el 12 de diciembre del año pasado no se ha reunido la mesa del agua».
En cuanto a la ordenanza que afecta a las tasas de los vehículos: «No vemos bien que se deje a un lado a los híbridos», afirmó Fernández. Y en relación a las bonificaciones de la Universidad Popular destacó que, ahora, para beneficiarse del descuento de parados de larga duración se debe demostrar un paro de 12 meses. «Se han ido endureciendo las ordenanzas, antes eran 6 meses de desempleo, lo que nos parece suficiente».
Fernández también analizó la ordenanza que afecta a la Zona Azul y Verde: «Intento no aparcar en zona azul hasta que este gestionada por un ente público, pero usuarios me han informado de la situación. La empresa ya viene cobrando precios indebidos, cinco céntimos más caro, desde antes de que se aprueben estas ordenanzas. Es decir, estamos aprobando una subida del IPC que ya se venía cobrando antes. Esta situación habrá que solucionarla de alguna manera. Este equipo nunca ha abierto expediente a las empresas por muchas aberraciones que hayan hecho, campan a sus anchas y torean al ayuntamiento de forma continua.
Fernández se preguntaba por qué en la ordenanza anterior no aparecían los precios que ahora se imponen para el alquiler de las instalaciones del Vivero de Empresas.
En cuanto a la bonificación del 50% en la tasa de Agua, Basuras y Alcantarillado, Fernández expuso: «La bonificación no debería eliminarse, debería quitarse esa subjetividad del alcalde y añadir la opinión de los técnicos. Vemos una subida al IPC, cuando el precio del agua en esta ciudad ya es una barbaridad. La gente acabará bebiendo aceite.
Las conclusiones de Izquierda Unida: «Nos encontramos ante un Ayuntamiento poco solidario. Se eliminan bonificaciones y se suben los precios. Además, presentar todas las modificaciones en conjunto solo tiene un mero interés político. Por lo que, aunque estemos a favor de algunas modificaciones, votamos en contra.