La secretaria provincial de Empleo y Formación Sindical de Comisiones Obreras en Albacete, Rosario Martínez Pedrosa, junto a la secretaria comarcal del sindicato en Almansa, Gracia Martínez Toledo, analizaron la evolución del mercado laboral en la comarca, con especial atención a la industria del calzado. Según los datos ofrecidos por CCOO, el paro subió un 5,46% en octubre, lo que supone 77 personas desempleadas más que el mes anterior, alcanzando un total de 1.488 personas inscritas en la localidad.
De ellas, 980 son mujeres y 508 hombres, lo que refleja una importante brecha de género. «Prácticamente de cada tres personas desempleadas, dos son mujeres», señaló Martínez Pedrosa, que también subrayó la brecha de edad, ya que el 62% de las personas desempleadas tienen más de 45 años.
El paro crece en Almansa
Por sectores, los servicios concentran el 62% de las personas desempleadas (929), seguidos de la industria (286, un 19%). Sin embargo, CCOO alerta de que el sector industrial es el más perjudicado, con un incremento del 7,3%, frente al 3,9% registrado en los servicios.
En cuanto a las contrataciones registradas en septiembre —último mes con datos cerrados—, señaló que se firmaron 547 contratos, de los cuales 206 fueron indefinidos y 341 temporales. «Solo la construcción se salva de la alta temporalidad, y sigue existiendo brecha de género: 142 contratos indefinidos para hombres frente a 64 para mujeres», precisó la responsable sindical.
Impacto en el sector del calzado
Por su parte, Gracia Martínez, secretaria comarcal de CCOO en Almansa, analizó el impacto directo de los aranceles del 15% al calzado español sobre las empresas locales. Según explicó, solo tres compañías importantes de la ciudad han sufrido consecuencias notables.
«Una de ellas aplicó un ERTE de tres semanas que ha evitado despidos; otra, que ya arrastraba problemas económicos, también ha recurrido a un ERTE; y una tercera, con el 100% de su mercado en Estados Unidos, sí ha tenido que realizar despidos objetivos», detalló.
En este último caso, la empresa, con una plantilla cercana a los 80 trabajadores, realizó nueve despidos hace unos meses y trece más recientemente. «La situación ha sido mala, pero menos mala de lo que pensábamos. Creíamos que los aranceles iban a ser un desastre para el sector, pero se ha estabilizado el mercado y se ha reactivado el consumo», concluyó.





