Lejos quedan para los almanseños y almanseñas los tiempos de aforos reducidos en las terrazas. Sin embargo, los vecinos de Yecla se encuentran de nuevo en el Nivel 3 de alerta por Covid-19 y su hostelería ya sufre las reducciones de aforo. El Gobierno de la Región de Murcia ha decidido que en interior el límite pasa de un 75% a un 30%, según anunció, hace unos días, el Comité de Seguimiento de la Pandemia. Además, el máximo de comensales que podrán ocupar una mesa dentro de los establecimientos queda limitado a seis personas.

Esta medida no viene acompañada de toque de queda ni restricciones en la movilidad. Es por eso que los hosteleros se quejan de que no será efectiva y solo supondrá un nuevo varapalo para sus negocios: «Trabajaremos al 30% y pagaremos impuestos al 100%», destacó José Antonio Ruiz, presidente de los hosteleros en Yecla, para el diario Siete Días.

Los hosteleros afirman que está más que demostrado que es el ocio privado lo que impulsa los contagios y que este se verá reforzado con las medidas que se están imponiendo para la hostelería. El presidente de los hosteleros yeclanos calificó estas restricciones como «incomprensibles, dañinas y peligrosas», pues augura que harán aumentar el número de botellones y fiestas similares.

Los trabajadores de hostelería también remarcan que, ahora mismo, el ritmo de vacunación es bueno y la presión hospitalaria es baja, por lo que no ven necesarias estas nuevas restricciones. Subrayan que no solo les harán perder beneficios procedentes del interior de los establecimientos, sino que provocan la cancelación de bodas, pues estos eventos se ven ahora limitados a 60 invitados en exterior y 30 personas en el interior. A su vez, aluden a que el empleo se verá afectado, ya que las contrataciones serán menos de las previstas.

Sin ayudas económicas

Desde la hostelería yeclana denuncian también que estas limitaciones no vienen acompañadas de compensaciones económicas, por lo que suponen un aumento en el desgaste que los dueños de bares, restaurantes y cafeterías vienen sufriendo desde los inicios de la pandemia. «Esto nos causa un daño enorme», añadió el presidente.

Una vez más, observamos de cerca el cansancio de la hostelería, uno de los sectores más castigados por esta insólita situación.

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