Izquierda Unida convocó a los medios de comunicación para hablar de transición energética y mostrar su rechazo a la instalación de una gran planta fotovoltaica en Almansa según las condiciones actuales. «Al principio cuando oímos que va a a implantar planta fotovoltaicas nos pareció buena idea, pero todo empieza a truncarse cuando vemos que los proyectos van a superar las 3.000 hectáreas, mismo tamaño que 100 campos de fútbol», así comenzó su intervención Laura Fernández, portavoz de IU Almansa.

«Esto va a ser como un mar negro de placas, pero el problema no es sólo visual, va más allá. Todos estos proyectos incluyen 8 plantas solares-fotovoltaicas. Cinco subestaciones colectoras de 30 kilovatios, tres subestaciones transformadoras, cuatro líneas de alta tensión, 151 torres eléctricas de de 55 a 65 metros de altura. Para que la gente se haga una idea, a los pies del Mugrón ya se puede ver una torre de las características, muy grande, pues bien con este proyecto habría 151 más», enumeró Fernández.

Según IU Almansa, con este instalación se eliminarán tierras fértiles por más de treinta años: «La maltrata agricultura va a tener aun más perjuicio, se perderían casi mil hectáreas de producción. Hay ciertos grupos que para defender este proyecto se escudan en que pueden ofrecer puestos de trabajo. Ni siquiera eso. Estas plantas suponen en un puesto de trabajo cada 50 megavatios. Lo que se traduciría en un total de 13 puestos de trabajo».

La portavoz izquierdista asegura que también afectará en una reducción del turismo: «Almansa se puede convertir en una placa solar gigante».

Desde IU Almansa apuestan por realizar la energía de proximidad, ya que la energía producida en Almansa se transportaría a la Comunidad Valenciana sin arrojar servicio en nuestro municipio.

«Por otra parte, lo que se viene haciendo con los propietarios de las tierras es alquilar los terrenos. Podríamos llegar al hecho de que mucha gente se podría beneficiar, algo que no creemos. Estos fondos de inversión buscan negociar con cuanta menos gente mejor, por lo que alquilan terrenos de grandes terratenientes para conseguir el mayor numero de hectáreas negociando con menos personas posible».

IU Almansa levanta esta «voz de alarma» en una Almansa donde se guarda «un silencio sepulcral» cuando en otros municipios similares y vecinos ya se organizan para evitarlo. «Queremos dejar claro que no estamos en contra de este tipo de energía. Solo queremos que las condiciones de su instalación cambien», advirtió Fernández.

«Hablando con técnicos de urbanismo y medio ambiente hemos podido recabar mucha información de los estudios que han hecho: hablan de que esta instalación no es compatible con la preservación de la naturaleza. Serían necesarias un gran paquete de medidas para regularizar la situación», afirmó la portavoz.

IU estudia y plantea opciones para evitar que este proyecto se realice de una manera, según su propias palabras, «tan aberrante», como sería la separación de kilómetros entre plantas, limitar la ocupación en hectáreas o no utilizar espacio donde haya otras plantas.

«Esto corre prisa, estamos en el periodo de alegaciones. Una vez que se apruebe el primero ya llegaremos tarde para regular la situación. Si el día de mañana, nos encontramos una ciudad inundada de negro y nos entristezca, que al menos tengamos la conciencia tranquila de saber que hicimos lo posible para que no sucediera», concluyó la edil.