Laura Fernández, concejala de Izquierda Unida en Almansa, tachó de «vergonzosa» la solución que el equipo de gobierno de PP y Ciudadanos ofrece tras haber cerrado las bibliotecas municipales en verano. Para el grupo municipal la habilitación de una sala de estudio en el Centro 11 de marzo es insuficiente.
La edil informó que, primero, se valoró utilizar la sala de la Asociación de Vecinos de San Isidro. «Pero no resultaba viable por no estar habilitada y, además, ser utilizada por la misma durante las mañanas». La opción definitiva ha sido, según Fernández, «poner una cortina» en el espacio multiusos del piso inferior del Centro 11 de marzo. «Le tengo que decir al equipo de gobierno que parece que, o bien no han estudiado en su vida, o no han ido a una biblioteca en su vida, por lo menos, a estudiar», reprochó.
Fernández calificó de «vergonzoso que, en un sitio donde hay un bar, personas mayores que juegan al dominó o a las cartas y hacen su vida social, entiendan que una persona se pueda estudiar detrás de una cortina».
Sin Wi-Fi ni enchufes
Izquierda Unida recuerdó que el reglamento de bibliotecas, recientemente aprobado, contempla en su apartado 2.5 el requisito de un nivel de ruido tolerable, mientras que en el espacio ofrecido, aseguran, los usuarios ya se han quejado del ruido. Además, Laura Fernández critica que la señal de Wi-Fi no llega correctamente, algo que también aparece en el apartado 3.4 del citado reglamento y «ni siquiera hay enchufes o puntos de luz para todos».
Para Fernández, «lo que quiere el equipo de Gobierno es que, cuando ya no haya ningún usuario, puedan decir que no hacía falta abrir en verano». La concejala asegura haber mantenido conversaciones con algunos usuarios que afirman que «no volverán más».
La formación de izquierdas pide al Ayuntamiento «que recapacite», pues «tenemos dos bibliotecas que tienen que dar servicio. No pueden aprobar un reglamento e incumplirlo dos meses después». Por último insisten en que, desde 2014, su grupo viene denunciando este problema que aún no se ha solucionado. Defienden que la falta de personal sigue provocando estos cierres y proponen, nuevamente, habilitar un aula de estudio en la que únicamente el personal municipal deba encargarse de abrir y cerrar, pero sí esté habilitada para el estudio.