Paco Núñez, presidente del PP de Castilla-La Mancha, visitó Almansa esta mañana y compareció ante los medios de comunicación tras mantener un encuentro con el alcalde de la localidad, Javier Sánchez Roselló. «El mensaje de los almanseños tiene voz. Y es que Paco Núñez siempre, siempre, siempre está en contacto con este equipo de Gobierno para que le transmitamos las necesidades de los almanseños», aseguró el líder de la corporación municipal.
Roselló hizo un repaso de la situación económica de la ciudad y transmitió que este es un momento «duro», tanto para los comerciantes como para los hosteleros e industrias afines. «Las ayudas de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha son bien recibidas, pero totalmente insuficientes, tal y como nos traslada la hostelería de Almansa y Albacete», explicó.
A esto se suma, en su opinión, que «los cierres perimetrales afectan más a Almansa, y por ello en los próximos Presupuestos municipales se contemplará el fomento del comercio en Almansa». Además, le pidió a la Junta que «esos cierres que se hacen sin diferenciar las diversas casuísticas de cada localidad, se hagan previo estudio y que se vea que los bares o los restaurantes no han sido focos de infección o contagio. Por lo tanto se puede abrir con limitaciones, como en otros sectores o comunidades».
En cuanto a la industrial del calzado, Roselló afirmó que, tras escuchar sus exigencias, se le ha demandado a la Junta que estudie medidas específicas para el sector, que «está pasando una etapa dificilísima, en la que se han suspendido todas las ferias internacionales y no pueden salir a vender. Por lo tanto lo que se haga en los próximos tres meses es esencial», matizó.
Núñez, por su parte, indicó que «la situación económica es realmente preocupante». Esta zona «es importante desde el punto de vista del calzado. En un momento de recisión económica, en el que hay dificultades para poder vender y por ende fabricar. Algo similar sucede con la hostelería, un sector con el que tengo una vinculación muy personal», recordó.
«La forma en la que los gobiernos socialistas, tanto el de Sánchez como el de Page, están criminalizando la hostelería no es de recibo. Han decidido que era la culpable, y no es así», declaró. Además, achacó que el Gobierno de Page estuvo desaparecido desde Navidades hasta enero, y cuando aparece «lo hace para cerrar y prohibir».
Test masivos y rehacer el plan de vacunación
Núñez defendió que la oposición al Gobierno de Castilla-La Mancha, «yo y los alcaldes como Javi», exige al Gobierno de Castilla-La Mancha dos cuestiones, según él, «fundamentales». En primer lugar, que se lleve a cabo la realización de test masivos para «conocer la situación real del virus en nuestra tierra». A este respecto dio dos datos: «Somos una de las tres comunidades autónomas que menos pruebas está haciendo por cada 100.000 habitantes y, sin embargo, la Comunidad Autónoma con mayor positividad en las pruebas de España».
Por otro lado, explicó que es «necesario» rehacer el plan de vacunación. «El PP liderará en Castilla-La Mancha, en el Pleno de las Cortes Regionales, una iniciativa para rehacerlo. Y es que, al ritmo al que se está vacunando hoy en la Comunidad tardaríamos 5 años en vacunar a la inmunidad del rebaño, el 70% de la población».
La labor de «Javi» como alcalde
Núñez terminó su intervención asegurando que «este gobierno municipal tiene a uno de los alcaldes que con mayor constancia está pidiendo a la Junta que se ponga en marcha un plan de rescate para la hostelería». Y remarcó: «Créanme cuando les digo que, como presidente regional de partido, uno de los lugares que está apretando con más fuerza para conseguirlo es Almansa y es su alcalde».
El Partido Popular consiguió, en sus palabras, que se celebrara un pleno para debatir exclusivamente la situación de la hostelería y exigimos un plan para este sector. «Alcaldes como Javi están liderando esta defensa desde el municipalismo y la escucha activa a los hosteleros para trasladar sus problemas, y que pueda haber una indemnización acorde con las pérdidas que les provoca no trabajar».
«Le digo a los hostelería de Almansa que vamos a seguir dando la batalla, porque creemos en los bares, establecimientos, distribuidores, carniceros, etc. No vamos a permanecer callados mientras se les prohíbe trabajar. Igual que en Francia, Italia, Holanda, Alemania y otros países, exigimos un plan de rescate que impida que esos 350.000 negocios en riesgo de cerrar lleven al paro a más de 1 millón de personas en España».
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