Clara López y Manolo Serrano, concejala y portavoz del Grupo Municipal Socialista, han puesto el foco de su atención en las obras de Rambla de la Mancha en el entorno de la Fuente del León, las mismas que terminaron justo antes de Fiestas de Mayo, proyecto que ha tenido un presupuesto de 100.000 euros. «Desde el principio, más allá de los aspectos estéticos y de accesibilidad que este arreglo suponía, los vecinos expresaron sus dudas sobre cómo se comportaría la calle cuando se produjeran lluvias», comenzó su intervención López.
«La Rambla, como su nombre indica, recorre una confluencia natural de aguas que causan daños y molestias cada vez que hay un episodio de lluvias intensas. Desde el Ayuntamiento se les tranquilizó diciendo que estos problemas iban a quedar solucionados con la nueva urbanización de la calle, que se habían adoptado las necesarias soluciones de ingeniería. La primera prueba de fuego llegó en plenas fiestas mayores y no con una lluvia muy intensa, se registraron apenas 20 litros y una intensidad máxima de 6 litros por hora. Pero la lluvia caída fue suficiente para comprobar que la calle no se comportaba como se esperaba, al menos como los vecinos se esperaban, rápidamente varios vecinos colgaron en Internet imágenes que demostraba lo que estaba pasando, el agua corría encajonada a todo el ancho de la calle a unos 30 cm de altura, Rambla se había convertido en un río imposible de transitar a pie y que los coches atravesaban con dificultad», declaró la edil.
«No fue una cantidad de lluvia infrecuente, 20 litros se pueden producir varias veces al año, y no sabemos qué puede pasar si caen 40, 60 u 80 como han caído otras veces. El punto quizá más conflictivo es el cruce de Alfonsico, aquí la corredera queda por debajo del nivel de la nueva urbanización, en este cruce el agua superó el nivel de la acera hasta inundar el local comercial que está justo en ese lugar y el portal del edificio donde se encuentra. Esto significa un charco de casi 50 cm de alto. En las imágenes puede verse como los coches se hunden en él y el agua tapa completamente los bajos de los vehículos. Hay incluso videos que muestran a coches que no se atreven a entrar en el charco y dan la vuelta en corredera», explicó Serrano y añadió: «En el cruce de Alfonsico la corredera queda por debajo del nivel de la nueva urbanización s crea un embolsamiento de 50 cm de alto».
«Hablando con los vecinos nos han explicado que desde el ayuntamiento les han dicho que el diseño era que el agua corriera por encima de la calle, que no se habían hecho modificaciones en el alcantarillado. Como se puede ver el nivel de la calle ha llegado en algunos puntos hasta las puertas de las casas que se verán inundadas cada vez que llueva. Este diseño de urbanización del S. XXI no va a evitar que los vecinos sigan poniendo tablas en las puertas para evitar que el agua de la Rambla entre en sus casas cada vez que llueve. Les han dicho que el diseño era que el agua corriera por encima de la calle, que no se habían hecho modificaciones en el alcantarillado», comentó el portavoz socialista.
«Desde aquí solo podemos pedir al Ayuntamiento y al departamento de Tania Andicoberry que no lo dejen así, que revisen lo que ha pasado y que hagan los cambios necesarios para evitar que estas inundaciones sigan pasando. De momento lo que vemos es que este diseño que se inauguró en fiestas se comporta peor frente a la lluvia que la calle en la situación anterior. Creemos que deben estudiar qué es lo que funciona mal y reformar la actuación para que no siga repitiéndose, empezando por este cruce de Alfonsico donde el agua se embalsa y llega a ser peligrosa. En pleno S.XXI los vecinos van a tener que seguir poniendo tablas en las puertas para evitar que el agua de la Rambla entre en sus casas cada vez que llueve», concluyeron los de la Casa del Pueblo.
