A mediados de 2019, Aqualia colocó una valla alrededor del pozo situado en la Circunvalación de Almansa. De forma posterior, la compañía de gestión del agua instaló allí un contador. Esto suscitó varias denuncias por parte de los grupos de la oposición al Ayuntamiento de la localidad, que argumentaron que la empresa privada no contaba con una cesión legal para su explotación. En marzo de 2020, un informe de la Secretaría del Ayuntamiento determinó que el pozo de la Circunvalación no formaba parte de los recursos que se transfirieron a Aqualia para su gestión. Además, se estipuló que su cesión debería de ser aprobada por el Pleno municipal y que el Ayuntamiento debía percibir una contraprestación económica por su uso. «Pero la cesión de este pozo a Aqualia nunca ha pasado por Pleno ni se ha hecho por ningún otro procedimiento», según aseguró Salud López, concejala del grupo socialista, esta mañana, en rueda de prensa. De esto concluyen que «Aqualia no es concesionaria de este servicio y, sin embargo, lo está explotando».

«El tema del pozo se quedó en el aire hace años, como otros temas que el alcalde mete en su cajón. Esto, al menos, hasta la semana pasada, cuando nos encontramos con que Aqualia ha pagado al Ayuntamiento un dinero por la gestión del pozo de la Circunvalación de junio a diciembre de 2020. Un total de 1.266,48 euros, que se corresponden con la mitad de los beneficios (2.533 euros), a repartir entre el Ayuntamiento y Aqualia al 50%», explicó López.

La concejala afirmó que en los gastos que justifica la empresa se incluyen los del vallado del pozo que el propio Ayuntamiento declaró ilegal y la luz desde junio de 2019, fecha en la que Aqualia se supone que dio de alta este servicio a su nombre. Por su parte, Pablo Sánchez, líder del grupo municipal, señaló que «a este grupo popular le parece bien que la empresa nos descuente las obras de la valla del pozo, que ha construido sin permiso y que la comisión de urbanismo le ha pedido dos veces que retire».

Sánchez recordó que esto es un «intento» más del equipo de Gobierno por adjudicar el servicio a Aqualia, aunque, en realidad, no se ha adjudicado. Y recordó: «En la comisión de hacienda de mayo de 2020 el asunto de la cesión se desestimó porque se pretendía ceder a Aqualia sin ninguna contraprestación. En la comisión junio se volvió a debatir con la propuesta negociada entre Ayuntamiento y Aqualia para compartir el 50% de los beneficios netos, un acuerdo que carecía de informes de contratación e intervención, y que a juicio del PSOE podría estar rayando la ilegalidad. Nuestra postura entonces fue que la explotación del pozo debería salir a concurso público, y el asunto finalmente, no llegó a pleno».

«En el pleno de junio se aprobaron las tasas de lo que habría de cobrarse por el uso de este servicio, seguía el concejal socialista, 1 euro metro cúbico. Pero no se adjudicó, ni se ha adjudicado nunca el sondeo a Aqualia. Hoy vemos que independientemente de lo que el ayuntamiento en Pleno hiciera o acordara, Aqualia empezó a gestionar y cobrar el agua de ese pozo desde los primeros días de junio de 2020, cuando aún no había tarifas municipales para ese servicio y cuando no tenía, ni ha tenido nunca, concesión para explotarlo. Y lleva ya un año vendiendo el agua en estas condiciones», defendió Sánchez.

Por ello, el PSOE cree que «es el momento de que Roselló dé explicaciones», pues «se trata de un hecho muy grave, que una empresa esté dando un servicio de carácter público sin tener concesión administrativa. El alcalde tiene que explicarnos cómo se ha llegado a este punto, ¿cuándo autorizó a Aqualia a explotar el pozo de la circunvalación? Por qué procedimiento hizo esta concesión, ¿dónde está el contrato correspondiente? Roselló debe explicar cómo fue capaz de hacer esta cesión de espaldas al Pleno municipal y en contra de los informes de la secretaría de este ayuntamiento».