Manuel Serrano, portavoz del grupo municipal socialista, y el concejal Valero González, lamentaron la falta de información de la implantación del contenedor marrón, en la mañana de ayer en rueda de prensa. González aludió a que «ya que han pasado 6 meses desde que se iniciara el arranque experimental en nuestra localidad y el equipo de gobierno no ha hecho balance de cómo va el servicio ni cuándo se va a extender a otras zonas de Almansa».

En noviembre del año pasado se inició una prueba piloto en el barrio del SUP 2 (conocido como el barrio de las Palmeras) y se instalaron 35 contenedores. «Se trató de una prueba in extremis, ya que la fecha máxima para la puesta en marcha del servicio de recogida de residuos de materia orgánica era el 31 de diciembre del 2021 y no era un problema de contenedores, porque desde el año 2020 teníamos 160 que nos había aportado el Consorcio Provincial de Medio Ambiente de la Diputación», recordó.

Desde la cesión de los contenedores, el «único movimiento» que había hecho el Ayuntamiento en cuanto a esta recogida de los residuos orgánicos había sido una campaña en algunos medios de comunicación, en el mes de noviembre de 2020, presentando este contenedor al que en Almansa llamamos “Glotton”. Y fue un año después, en noviembre de 2021, cuando se inició la puesta en marcha del servicio en modo de prueba. «Según informó el equipo de gobierno en ese momento, en función de los resultados del servicio y del nivel de aceptación, su idea era extrapolar la recogida a todo el casco urbano» y ya han pasado 6 meses, subrayó González. «No sabemos nada de esos resultados, del nivel de aceptación y de si se va a extender al resto de la localidad».

Serrano explicó que consideran que hacer un balance es necesario porque «no podemos limitarnos a dejar el servicio solo en una prueba en una zona de la ciudad, sino que se debe trabajar para extenderlo por toda la localidad y tener un plan de expansión, ya que introducir este nuevo contenedor conlleva una serie de recursos alternativos. Con los recursos del Ayuntamiento no se puede acometer la recogida y se tiene que externalizar».

A su juicio, en ese balance también se debe tener en cuenta el impulso que se haya hecho o no desde el Ayuntamiento sobre el uso del contenedor ya que «las campañas de concienciación han brillado por su ausencia» y «sin información es imposible que los vecinos y vecinas sean conscientes de los beneficios de este nuevo sistema de reciclaje». Y afirmó que es un servicio del que «seguro que podríamos ser líderes, al igual que lo somos en el resto de la provincia en la recogida de otros residuos como plástico, cartón o vidrio».

El portavoz socialista indicó que la recogida selectiva por parte de los ayuntamientos de la materia orgánica es ya una obligación para todos los municipios mayores de 5.000 habitantes y que la mayoría de estos ayuntamientos realizan encuestas de satisfacción entre sus vecinos. «En  Almansa también es obligatorio, pero la estrategia es la que tiene este equipo de gobierno es la tener en marcha el servicio en una parte muy pequeña de la población para cumplir una obligación legal».

Apuntan que «como el uso es escaso, la frecuencia de recogida no es alta y los vecinos sufren los olores de la materia orgánica en descomposición, por eso se han llevado la prueba piloto a un barrio de la periferia. Por eso no se han hecho campañas de información, por eso no se ha hecho balance de los resultados hasta la fecha y por eso otros 125 contenedores marrones cedidos por la Diputación siguen en un solar municipal sin utilizarse». Esto, ha aclarado Serrano, es una obligación del Ayuntamiento que viene recogida en la Ley de Residuos de 2011 y la Directiva Europea de 2008, que fue aprobada por el congreso en el congreso con la Ley 7/2022 de Residuos y suelos contaminados.

«Tenemos los contenedores a nuestra disposición, podríamos tener una base de información con la que trabajar y ver qué fallos se han cometido con estos 6 meses de prueba y los vecinos y vecinas de las zonas donde no está instalado están preguntando por el servicio. Sólo hace falta que el equipo de gobierno tenga voluntad y se ponga a trabajar para que toda la ciudad pueda disponer de los contenedores marrones en sus barrios. Roselló, si contesta, dirá que están trabajando en ello (como siempre) pero llegan tarde a la vez que perjudican a la ciudadanía», finalizó.