«Hablar de personas refugiadas es hablar de despedidas forzadas, de maletas llenas de miedo y de incertidumbre, pero también de esperanza». Con estas palabras comenzó Lauremi Galipolly —socióloga, refugiada venezolana y vecina de Almansa— la lectura del manifiesto con motivo del Día Internacional de las Personas Refugiadas. Lo hizo compartiendo su testimonio en primera persona, poniendo voz y rostro a una realidad que afecta a millones de personas en todo el mundo.
Manifiesto por el Día Internacional de las Personas Refugiadas
Lauremi Galipolly explicó que su salida de Venezuela no fue voluntaria, sino una huida forzada por «un régimen dictatorial que destruyó la libertad, el trabajo, la tranquilidad y los sueños de millones de venezolanos». Al abandonar su país, aseguró, también dejó atrás su profesión, sus afectos y su identidad, y llegó a esta tierra «no solo con una maleta, sino con dos hijos pequeños de la mano y el corazón lleno de incertidumbre, pero también de amor y coraje».
Durante su intervención, insistió en que ser migrante implica empezar de cero, aceptar trabajos inesperados y, sobre todo, descubrir una fortaleza interior que desconocías. «Reinventarte cada día», subrayó. Ese proceso la llevó hasta España, y concretamente a Almansa, donde —dijo— encontró algo más que un destino. «Aquí encontré no solo un lugar, sino un hogar. Y algo que siempre voy a agradecer profundamente: mis hijos pequeños han sido recibidos aquí como uno más, con cariño, con respeto y con oportunidades por todos ustedes», añadió.
A pesar de haber tenido que dejar atrás su carrera como socióloga, Galipolly afirmó que su vocación permanece intacta y que defender a los necesitados, trabajar por los más vulnerables, es algo que no se le puede arrebatar. «Es parte de mi identidad, esté donde esté», reconoció.
También destacó que, durante el año 2024, España recibió 167.366 solicitudes de asilo, de las cuales se resolvieron 96.251 expedientes.
«Emigrar no nos hace menos. Nos hace valientes. Nos hace resilientes. Nos hace más humanos», afirmó, citando a Nelson Mandela: «No puede haber una revelación más intensa del alma de una sociedad que la forma en que trata a sus niños». A lo que añadió ella misma: «Ni a sus migrantes».
«Gracias por escuchar. Gracias por acompañar. Gracias, España, por ser refugio», concluyó.
«Para por Palestina»
Durante el acto, también se presentó la campaña «Para por Palestina», una iniciativa impulsada por la Plataforma de Apoyo a las Personas Refugiadas de Almansa, que tiene como objetivo visibilizar la situación del pueblo palestino.
La propuesta consiste en realizar cada día, y hasta el 30 de junio, a las 12:00 del mediodía, una fotografía con un cartel reivindicativo y compartirla en redes sociales mencionando a la plataforma. Los carteles están disponibles en la Casa de Cultura.
