El eco de la historia en forma de disparos y el inconfundible aroma a pólvora envolvieron este fin de semana a Almansa durante el encuentro de arcabucería celebrado en el marco del Centenario de la Coronación de la Virgen de Belén. La localidad recibió a la soldadesca de Yecla, que desplegó en el Santuario de Belén y en la Plaza Santa María una muestra de sus Arcas Cerradas, declaradas de Interés Turístico Internacional. Foto: Arantxa Rovira
El encuentro de sabor histórico, organizado por la Agrupación de Comparsas de Moros y Cristianos, comenzó en el Santuario de Belén, donde la ermita se abarrotó de público para presenciar la primera descarga de arcabucería. A continuación, los participantes se trasladaron al casco urbano para compartir un almuerzo de convivencia ofrecido por la Comparsa Zegríes, que sirvió para estrechar lazos entre Yecla y Almansa. La jornada continuó con la recepción en el Ayuntamiento y una segunda demostración en la Plaza Santa María, con el castillo como telón de fondo.
Una pincelada de las fiestas de Yecla
Los asistentes disfrutaron de las tradicionales «Arcas Cerradas» de la soldadesca de Yecla, una ceremonia en la que los arcabuceros forman un semicírculo alrededor del capitán y el alférez mayordomo. Mientras el alférez hace ondear la bandera al son de un vals, los tiradores disparan salvas. «En Yecla participan 500 arcabuceros, aquí fueron 50, pero sirvió como una pincelada de lo que son sus fiestas, declaradas ya de Interés Turístico Internacional», explicó Paco Millán, presidente de la Agrupación de Comparsas.
El presidente destacó además la conexión entre ambas localidades, unidas por la pólvora, cada vez más presente en las Fiestas Mayores de Almansa. En apenas cuatro años, el uso de pólvora en los festejos locales ha pasado de 160 a 310 kilos, un récord histórico.
Uno de los momentos más valorados fue la descarga frente al santuario, un espacio en el que nunca antes se había disparado. «Para los tiradores de Almansa fue una experiencia distinta a la de los desfiles por las calles del municipio, y para el público también tuvo un atractivo especial», señaló Millán.
Más de 400 tapones repartidos
El éxito fue rotundo: se repartieron más de 300 tapones en Belén y otros 150 en la demostración de la Plaza Santa María. «Que se agoten los tapones es la mejor señal de participación. Me sorprendió gratamente la respuesta del público», reconoció el presidente.
Millán valoró el encuentro como «muy positivo y esperanzador». Además, adelantó que el próximo sábado la ciudad acogerá el último evento del ciclo del centenario, con la participación de cuatro poblaciones más: el I Encuentro Nacional de Conversiones del Moro.
Nuevo curso de arcabucería en Almansa
Este sábado, a las 17:00, la Casa del Festero acogerá un nuevo curso de arcabucería organizado por la Agrupación de Comparsas e impartido por Arcabucería El Rojo de Caudete. Se trata de una formación necesaria para poder disparar en Almansa. Lo cual nos regala, otro dato que refleja el creciente interés por esta tradición festera: «Cada vez son más las mujeres que se animan a disparar. En este último curso hay 18 inscritos y más de la mitad son mujeres», destaca Millán.
La inscripción es libre, basta con presentarse con el DNI, sin necesidad de disponer previamente de licencia.