Sin carrozas sí hay paraíso. El día feliz del colectivo LGTBI amaneció en Almansa como tantos otros Orgullos. Quizá los hubo más juguetones y festivos, como el último antes de la pandemia. Aquel en que un bolso aterrizó accidentalmente en la copa de un árbol —durante el concurso de lanzamiento de complementos—; aquel en el que hubo más algarabía, más afluencia y más cenas multitudinarias. Este año no pudo ser tan colorido, pero sí más reivindicativo.

El sábado 3 de julio, las calles de Almansa despertaron con menos tráfico del habitual en una mañana de calor extremo. Eso sí, sopló viento fresco entre el Mercado Central y la avenida San Francisco. En ese entorno, los y las integrantes de Almansa Entiende, portando mascarillas multicolor, administraron «vacunas» contra la lgtbifobia (o lo que es lo mismo: cintas con la enseña del Orgullo para atar al rededor de las muñecas) a todas las personas que se acercaban. «A mí ya me han vacunado cuatro veces», bromeó uno de los vecinos que acudió al acto de presentación de la jornada, almanseño de 56 años, que deseó que el Orgullo fueran «todos los fines de semana».

El humor (no exento de crítica) caracterizó esta primera performance contra el odio hacia el colectivo. Nadie podía imaginar que, al día siguiente, España se levantaría conmocionada por la noticia del asesinato de Samuel, de 24 años, que recibió una paliza mortal en Riazor (La Coruña). Según relató una testigo del suceso para El Mundo, una de las últimas frases que el joven escuchó antes de morir fue: «O paras de grabar o te mato, maricón».

Horas antes, los chicos de Almansa Entiende recibían el mismo descalificativo. Sucedió durante la marcha motorizada que la asociación realizó desde el Ayuntamiento Viejo hasta el Jardín de los Reyes Católicos, sobre las 8:30 horas. El séquito arcoíris estaba formado por un descapotable, una furgoneta y un tercer coche cerrando filas. La música, los cláxones, las banderas multicolores y las consignas («Vacúnate con la “transen”» o «Almansa, mañana, será gay y lesbiana») anunciaban el paso de la comitiva por las principales avenidas de la ciudad.

Desde el interior de los vehículos (la arribafirmante tuvo acceso a uno de ellos) se apreciaban todas las reacciones que suscitaba la caravana arcoíris. La inmensa mayoría de viandantes la recibieron con sonrisas, bailes y ovaciones; aunque hubo quien prefirió desenvainar el dedo medio y gritar «¡maricones!». Sin embargo, este episodio homófobo no enturbió el ánimo pacífico de la furgoneta y, desde el interior, se profirió la respuesta: «¡Y a mucha honra!».

La marcha finalizó en el Templete sin mayor sobresalto. Una batucada calentó al público asistente antes de comenzar con la lectura del manifiesto del Orgullo de Almansa 2021. Niños, niñas y mayores bailaron al son. Las integrantes de la composición acudieron ataviadas con camisetas, cada una de un color, en clara alusión a la bandera de la diversidad. Inmeditamente después, Flavia Garrigós, presidenta de Almansa Entiende, y Rocío Martínez, fundadora, se hicieron con el micro.

El manifiesto no esquivó el tema más debatido en el seno del Ministerio de Igualdad: el anteproyecto para una Ley Trans, finalmente fusionada con la Ley LGTBI, y que aún debe pasar al Congreso para su aprobación definitiva. «Esta ley no contempla algunas medidas presentes en el anterior borrador y deja fuera a menores de 14 años, personas no binarias y migrantes. Desde Almansa Entiende expresamos nuestra disconformidad con estos recortes. Celebramos los avances jurídicos, pero seguiremos luchando por una igualdad real», señaló Martínez.

También hubo espacio para la crítica a los poderes públicos. La fundadora solicitó que «no se nos utilice para crear conflicto político; para trasladar a la población mensajes de odio, desinformación y dudas sobre temas que estaban asumidos y superados. Tampoco podemos aceptar que esta “polémica” se utilice para paralizar la ley LGTBI en nuestra región. Solo cinco comunidades autónomas no tienen ley LGTBI y Castilla-La Mancha es una de ellas», destacó. Tras los vítores del público (unas 80 personas), el acto finalizó con una nueva ronda de tambores.

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Galería Orgullo Almansa 2021: