Un rincón singular y lleno de alma acoge en Almansa una exposición con medio centenar de obras de Fufi, con un único objetivo: que, a sus 70 años y desde la residencia pública en la que vive, pueda seguir pintando y haciendo lo que hace feliz a este artista, tan peculiar como el espacio que acogerá sus trabajos. La muestra está abierta al público y se puede disfrutar con cita previa, de forma individual o en grupo.
«Fufi vive por y para pintar. Si pinta, es feliz. Y eso es lo que buscamos, que pueda seguir haciéndolo», explica Florencio ‘Flo’ Sáez, impulsor de este proyecto y fundador de la asociación DASS Adicciones, a La Tinta de Almansa. La colaboración entre ambos nace como una iniciativa destinada a ayudarle a cubrir sus gastos de manutención y proporcionarle pinturas acrílicas, lienzos y otras herramientas necesarias, para que pueda seguir creando dentro del centro residencial tutelado en la que se encuentra actualmente, en Villarrobledo. Allí dentro, el lienzo es para él una ventana.
Un espacio con corazón
Esta exposición no es un montaje tradicional. «Aquí no hay etiquetas ni prisas, es una experiencia íntima y guiada, con cariño, en un entorno tranquilo», explica Flo. Para visitarla, ya sea de forma individual o grupal, hay que concertar una cita previa a través de la cuenta de Instagram @fufismo.
El promotor de esta idea bautizó su sala de exposiciones como «La Cuadra». «La llamo así porque era una antigua entrada al patio, a la cuadra de una casa vieja». Ahora es una cochera reconvertida en un lugar donde poder entender mejor la vida y el mundo interior de Fufi. «Lo que nos une es el cariño. Él es amor, puro amor. Yo siempre digo que es un corazoncico con patas», resume.
Fufi actualmente vive en una residencia, tiene 70 años y una larga trayectoria en la que ha pasado por distintas etapas artísticas. Aunque su estilo va evolucionando, conserva su trazo y su sello personal, lo que lo hace único. Solo pinta por las noches o a última hora de la tarde, y sus obras muestran ingenio, color, religión, tristeza, amor, incluso lujuria, lo que interpela rápidamente al espectador. «Su pintura de hoy no es la misma que la de hace 15 o 30 años, pero siempre mantiene su esencia. Él pinta con el alma», señala Flo.
Entre las obras, algunas están dedicadas a la familia y a Brasas, el gato de Flo. Él confiesa a este periódico que intenta visitarle cada mes para ver cómo está y ofrecerle ese trato humano que le falta en la residencia. A cambio, Fufi lo sorprende con una obra nueva. «La primera pieza de la colección siempre será la más especial, pero cada mes que lo visito me enamoro de una nueva», apunta.
¿Una exposición pública?
Aunque por ahora la exposición es privada, el objetivo es llevar la colección a la Casa de Cultura a finales de este año o a principios de 2026, donde previsiblemente habrá más obras que las que están actualmente expuestas. «La obra sigue creciendo, he reservado cuadros que no están en esta exposición y cosas nuevas que guardo para el futuro», adelanta Flo.
Los cuadros de Fufi están llenos de referencias a la tierra, a Dios, al hogar. El visitante puede —y debe— detenerse a observar, a leer, a preguntarse. «Me gustaría que lo compartieran, que intenten entender qué quiere contar. Y sobre todo, que lo disfruten», apunta Flo.
Además, las obras pueden adquirirse por un precio asequible. Toda la recaudación, «con absoluta transparencia», irá destinada a comprar material, lienzos y pinturas para que Fufi pueda seguir haciendo lo que ama. «Todo el dinero va a una caja con su nombre. Es para él, para pagar sus pequeños caprichos, lienzos, pinturas… para que siga creando».
Como novedad, Fufi ya forma parte de la Asociación de Pintores Sergio Sarrión y una obra suya estará presente en la próxima Balconada de Almansa con una pieza que, seguro, no dejará a nadie indiferente.
Un artista incomprendido
Flo tiene claro que algún día a Fufi se le reconocerá, al menos a nivel local, como un artista muy avanzado a su época, aunque quizá incomprendido. «Tiene un mundo interno muy complejo, marcado por sus vivencias, su enfermedad y su condición sexual. Es una persona muy adelantada a su época. Aunque a veces cueste que se exprese por sus limitaciones, es entrañable y alguien de quien se puede aprender mucho», admite.
Vecinas, vecinos, amantes del arte, curiosos, curiosas e incluso los y las más pequeños de la casa ya han podido disfrutar de la exposición. Por el momento, «La Cuadra» permanece abierta para quienes deseen descubrirla, sentirla y llevarse un pedacito del alma de Fufi. Puedes visitarla contactando con Flo a través de llamada de teléfono o Whatsapp al 648 81 14 19.