Un americano en Almansa en Guerra Civil | Hay veces que para encontrar historias extraordinarias solo hace falta levantar la vista y mirar a nuestro alrededor. A lo largo del tiempo, nuestros antepasados nos han dejado huellas en muros y paredes para constatar sus propósitos. Ya desde la Prehistoria, el ser humano dejó su impronta en cuevas y abrigos por gran parte de nuestra península Ibérica. En Almansa, contamos con los abrigos prehistóricos del Barranco del Cabezo del Moro y los abrigos de Olula declarados Patrimonio de la Humanidad. Foto principal |GRUPO DE ARTILLERÍA DE LAS BRIGADISTAS INTERNACIONALES EN ALMANSA. Archivo del CEDOBI
Un americano en Almansa
Sin embargo, la historia que les voy a contar es mucho más reciente. Hace algunos años, investigando sobre los grafitis de la Guerra Civil del convento de las monjas Agustinas, encontré un grafiti en una de las paredes del recinto. Debido a la humedad y al paso del tiempo, me fue complicado descifrar su sentido. Tras la búsqueda en los archivos de las Brigadas Internacionales de Albacete, pude descubrir que se trataba de Paul Sídney Crosby, un estadounidense nacido el 28 de marzo de 1911.
Era de North Platte, Nebraska, estaba divorciado y era trabajador de un hotel. Se alistó el 23 de septiembre de 1937 en las Brigadas Internacionales con la dirección que aparece en el grafiti: 94 de La Salle Place, Louisville, Kentucky. El 2 de octubre de 1937 puso rumbo a España a bordo del barco Georgic y llegó el 15 de ese mismo mes.
Una vez llegó a España, pasó por diferentes cuerpos militares. Su instrucción comenzó en la Segunda Base desde el 21 de octubre al 28 de diciembre. Más tarde, pasó a formar parte de la Batería de Artillería Angloamericana número 35º. Posteriormente, fue destinado a la Batería Antiaérea Checa del 11 de febrero al 22 de marzo.
Unos días después, llegó a Almansa y engrosó en las filas de la 45º División de Artillería, momento en el que realizó el grafiti en una de las paredes del convento de las monjas Agustinas. Estuvo hasta el 30 de abril ya que el día 1 de mayo ingresó en la XV Brigada Abraham Lincoln-Washington BN, con el rango de soldado.
El final de su Guerra Civil
El 27 de julio de 1938 fue alcanzado por un francotirador que le hirió en ambos codos. Fue trasladado al hospital número 2 de Barcelona y, posteriormente, al número 7 de Mataró hasta su repatriación. El 20 de diciembre retornó a Estados Unidos a bordo del buque Ausonia. Sin embargo, falleció el 17 de enero del año siguiente debido a una neumonía que se complicó a causa de las heridas de guerra en el condado de Jefferson, Kentucky (EE.UU.).
Hoy, casi noventa años después, la impronta que dejó Paul Crosby en una de las paredes de las Agustinas nos recuerda el paso de este brigadista estadounidense por Almansa. Es importante recuperar y en poner en valor la memoria de estos combatientes en el acontecimiento más trágico y traumático de la historia de nuestro país.